CÓMO MEJORAR NUESTRA PRONUNCIACIÓN AL HABLAR EN INGLÉS
Una de las partes más difíciles a la hora de aprender inglés es la pronunciación. Aún teniendo un nivel muy alto de gramática y vocabulario, puede que tengas problemas a la hora de darte a entender por culpa de tu pronunciación.
– What?
– Excuse me?
– Can you repeat, please?
Estamos acostumbrados a una pronunciación literal en el español y al percatarnos de todos los cambios que existen en las palabras al pronunciarlas en inglés nos confunden y consiguen que más de uno se desilusione con este idioma. Además, el inglés tiene sonidos y posiciones de nuestra mandíbula que no existen en español, así que si no prestamos atención a algunos de estas recomendaciones que planteamos más abajo, puede que nunca consigamos tener un acento con el que cualquier persona pueda entendernos y sin nadie que nos corrija, acabamos adoptando una serie de vicios que luego nos son más difíciles de corregir.
A continuación te proponemos 5 consejos que esperamos te sirvan de ayuda para mejorar tu pronunciación.
1. Aprende escuchando
A la hora de aprender un idioma, hay que prestar mucha atención escuchando los nuevos sonidos. ¿Eres capaz de distinguir la diferencia entre chin y shin? O de sleep y slip? Si reconoces los diferentes sonidos, también serás capaz de producirlos correctamente.
Para aprender a escuchar y así identificar nuevos sonidos, es buena idea ver películas en versión original, escuchar música, charlas motivacionales o podcasts… Además de pasar un rato divertido ¡tu pronunciación mejorará notablemente!
2. Presta atención a tus labios, boca y lengua
Al hablar es necesario mover la boca y la manera de moverla afecta a tu pronunciación.
La letra ‘S’
Es un error muy habitual que cometemos y que consiste en que añadimos una ‘E’ al pronunciar términos que empiezan por ‘S’. Es ‘Spain», y no ‘Espain’.
Las letras ‘P’, ‘T’, y ‘K’
Las incluimos en un pack porque todas ellas se rigen por la misma regla a la hora de vocalizarlas: hay que soplar o echar aire cuando aparecen. Park o time son buenos ejemplos de ello.
Esta generalización no siempre se cumple, pues una sola letra puede tener sonidos muy diferentes. Precisamente éste es uno de los motivos por los que aprender pronunciación en inglés se nos resiste…
La letra W
Los nativos casi nunca pronuncian esta letra (sobre todo si va a principio de palabra). La convierte en apenas un susurro. Por ejemplo, el caso de Greenwich, suena más bien a ‘Grénich’. Answer suena «anser«, write suena «rait» y sword suena «sord«. Who lo vocalizamos como ‘Ju’ ya que la ‘W’ prácticamente desaparece y nos quedamos tan sólo con el sonido de la ‘J’ aspirada de la ‘H’ inglesa y el de la ‘U’ = ‘Ju’.
Las letras mudas
Nos referimos a conjuntos de palabras que no han de vocalizarse. Por ejemplo, la ‘L’ de ‘Would’, ‘Could’, ‘Should’ o ‘Walk’ no ha de pronunciarse.
Las Vocales
Debemos considerar que un gran número de vocales en sílabas no acentuadas adquieren el sonido [ǝ] también conocido como ‘schwa’. Es el sonido más común del idioma inglés, pues suele estar presente en toda palabra de más de dos sílabas. Por ejemplo problem es «problǝm» o sentence es «sentǝns».
Ahora que sabes posicionar tu boca, ¿notas la diferencia?
3. Acentúa los sonidos y las palabras
El inglés es una lengua de acento fuerte. Esto significa que algunas palabras y sonidos son más importantes que otros. Saber acentuar todas las palabras es importante ya que, en ocasiones, el acento de la palabra puede cambiar su significado.
No es lo mismo acentuar la palabra «present» con la fuerza en la primera sílaba que en la sílaba final:
PRE.sent (regalo) pre.SENT (verbo presentar)
Al igual que ocurre con el español, en inglés existen reglas de acentuación, por ejemplo:
La mayoría de sustantivos de dos sílabas tienen acento en la primera sílaba, y la mayoría de verbos de dos sílabas tienen su acento en la segunda.
Pero no debes memorizar todas y cada una de las reglas. La mejor manera de aprender es escuchando y practicando, pero está bien tener constancia de cómo funciona un idioma.
4. Grábate
Una manera de descubrir si tus prácticas están dando resultados es grabándote con una cámara. Es importante que uses una cámara y no solo una grabadora de sonido, debido a que tienes que ver cómo hablas y no solo escuchar lo que dices.
5. Practica con un amigo o compañero
Encuentra a alguien para practicar tu pronunciación. Al practicar con un amigo, podrás probar lo que aprendiste y aprender cosas nuevas. Además, ¡pasarás un buen rato!
Muchas personas creen que hablar fluido implica hablar rápido, pero esto no es del todo cierto. Hablar muy rápido puede acrecentar malos hábitos y hace que la persona que está hablando parezca nerviosa o indecisa. Hablar de una manera lenta o tranquila te dará tiempo para respirar y pensar en lo que quieres decir, te hará sentir más relajado y así podrás concentrarte en que tu inglés suene mejor.
Esperamos haber dejado claro con este artículo que la pronunciación es tan importante como el vocabulario y la gramática. Cierto es que hay muchas más cosas a tener en cuenta para conseguir una extraordinaria pronunciación, pero aplicando estos consejos estamos seguros de que poco a poco os sentiréis más seguros a la hora de hablar mejorando considerablemente vuestra capacidad de expresión!
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